3. Errantry John Ronald Reuel Tolkien (1892-1973)
There was a merry passenger, a messenger a mariner: he built a gilded gondola to wander in and had in her a load of yellow oranges and porridge for his provender; he perfumed her with marjoram, and cardamom and lavender.
He called the winds of Argosies, with cargoes in to carry him, across the rivers seventeen, that lay between to tarry him. He landed all in loneliness, where stonily the pebbles on, the running river Derrilyn, goes merrily for ever on. He journeyed then through meadow-lands, to shadow-land that dreary lay, and under hill and over hill, went roving still a weary way. He sat and sang a melody, his errantry a tarrying, he begged a pretty butterfly, that fluttered by to merry him. She scorned him and she scoffed at him, she laughed at him unpitying, so long he studied wizardry, and segaldry and smithying.
He wove a tissue very thin, to snare her in; to follow her, he made him beetle-leatherwing, and feather wing of swallow hair.
He caught her in bewilderment, with filament of spider-thread. He made her soft pavilions, of lilies and a bridal bed, of flowers and of thistle-down, to nestle down and rest her in, and silken webs of filmy white, and silver light he dressed her in. He threaded gems and necklaces, but recklessly she squandered them, and fell to bitter quarrelling, then sorrowing he wandered on, and there he left her withering as shivering he fled away; with windy weather following, on swallow-wing he sped away.
He passed the achipelagoes, where yellow grows the marigold, with countless silver fountains are, and mountains are of fairy-gold. He took to war and foraying, a harrying beyond the sea, and roaming over Belmary, and Thellamie and Fantasie.
He made a shield and morion, of coral and of ivory. A sword he made of emerald, and terrible his rivalry, with elven knights of Aerie and Faerie, with paladins that golden-haired, and shining-eyed came riding by, and challenged him.
Of crystal was his habergeon, his scabbard of chalcedony, with silver tipped and plenilune, his spear was hewn of ebony. His javelins were of malachite and stalactite - he brandished them, and went and fought the dragon flies, of Paradise, and vanquished them.
He battled with the Dumbledors, the Hummerhorns, and Honeybees, and won the Golden Honeycomb, and running home on sunny seas, in ship of leaves and gossamer, with blossom for a canopy, he sat and sang, and furbished up, and burnished up his panoply.
He tarried for a little while, in little isles that lonely lay, and found their naught but blowing grass. And so at last, the only way he took, and turned, and coming home with honeycomb, to memory his message came, and errand too! In derring-do and glamoury, he had forgot them, journeying and tourneying, a wanderer. So now he must depart again, and start again bis gondola, for ever still a messenger a passenger, a tarrier, a roving as a feather does, a weather-driven mariner.
3. Vida errante
Había una vez un alegre viajero, Un mensajero, un marinero: Construyó una dorada góndola Para aventurarse y la cargó De amarillas naranjas Y de gachas para su sustento; La perfumó con mejorana Y cardamomo y lavanda.
Llamó a los vientos de Argos Para que le transportaran con carga y todo A través de los diecisiete ríos Que se interponían en su camino para retrasarle. Desembarcó solitario Donde los guijarros de piedra, En el corriente río Derrilyn, Fluyen felizmente para siempre. Viajó entonces a través de tierras de prados Hasta la Tierra de las Sombras, que yace tristemente, Y bajo la colina y sobre la colina Fue bogando por la tediosa ruta.
Se sentó y cantó una melodía, Demorando su vida errante; Pidió a una bella mariposa Que aleteaba cerca que se casara con él. Ella le despreció y se burló de él, Se rió de él sin piedad; Tanto tiempo había él estudiado magia Y hechicería y herrería. Trenzó un tejido delgado como el aire Para cazarla; para seguirla Se hizo alas de piel de escarabajo Y alas emplumadas de golondrina.
La atrapó en su aturdimiento Con hilos de telas de araña; Construyó para ella dulces pabellones De lilas, y una cama nupcial De flores y abrojos Para acurrucarse en ella y descansar; Y de telas de seda de membranoso blanco Y luz de plata la vistió.
Ensartó gemas en collares, Pero imprudentemente ella los derrochó Y dio en amargas disputas; Entonces pesarosamente él se alejó, Y allí la dejó, marchitándose, Mientras él se iba tiritando; Con tiempo ventoso tras él Huyó con alas de golondrina.
Dejó atrás los archipiélagos Donde crecen amarillas las margaritas, Donde existen incontables fuentes de plata, Y las montañas son del oro de las Hadas. Contempló la guerra y el pillaje Asolando más allá del mar, Y vagó por Belmarie Y Thellamie y Fantasie.
Se hizo casco y escudo De coral y de marfil, De esmeralda hizo una espada, Y terrible fue su rivalidad Con caballeros élficos de Aerie Y Faerie, con paladines Que, con cabellos dorados y ojos brillantes, Vinieron cabalgando y le desafiaron.
De cristal era su cota de malla, Su vaina, de calcedonia; Guarnecida de plata en plenilunio, Su lanza estaba trabajada en ébano. Sus jabalinas eran de malaquita Y estalactita-las blandió, Se enfrentó a las libélulas De Paradise, y las venció.
Combatió a los Dumbledors, A los Hummerhorns y a las Honeybees, Y conquistó el Peine Dorado; Y volviendo a casa, por mares soleados En un buque de hojas y gasas Con una flor por dosel, Se sentó y cantó, y acicaló Y pulió su panoplia.
Se demoró por un tiempo En pequeñas islas que yacían solitarias, Y encontró allí poca hierba, aunque alta; Así que al final fue el único camino Que tomó, y volvió, y regresó a casa Con el Peine Dorado, su mensaje Llegó a ser recordado, ¡y también su recado! En su alegría y su embeleso Los había olvidado, errando Y viajando, como un vagabundo.
De modo que ahora debe partir de nuevo Y de nuevo empezar su góndola, Para siempre un mensajero, Un viajero demorado, Errante como una pluma, Un marinero guiado por el viento.Etiquetas: J.R.R. Tolkien |